COLOMBIA ABRAZA AL PUEBLO ARAUCANO: Lucha por la paz y la convivencia en el territorio.
Horas de zozobra y terror vive por estos días el pueblo Araucano por una nueva ola de violencia entre grupos armados que hacen presencia en ese departamento fronterizo con hermano país venezolano, desatando agresiones contra la población civil y que, con absurdos y delirantes argumentos, han causado el asesinato de civiles, atentados secuestros, desplazamientos, confinamiento de comunidades enteras y así mismo se han intensificado las amenazas, señalamientos y el reclutamiento forzoso de menores de edad.
Los responsables de estos ataques sistemático al pueblo de Arauca, son sin duda alguna, en primer lugar el abandono estatal intencional, qué se ha negado ultranza a la implementación real del Acuerdo Final de Paz y el desprecio al desarrollo de una política social de inversión que permita superar el histórico abandonó, generador de pobreza, exclusión y atraso a los pobladores de la región y por el contrario el gobierno ha enviado más pie de fuerza a un departamento ya fuertemente militarizado, con el doble propósito de garantizar la protección a la infraestructura energética y contribuir a escalar la tensión que hoy existe en las frágiles relaciones colombo-venezolanas, mientras qué esa exagerada militarización no brinda garantía alguna respecto a la defensa y protección de los derechos humanos y de la población civil a la que debieran proteger principalmente.
No menor responsabilidad tiene el Ejército de Liberación Nacional y las autodenominadas disidencias de las FARC, qué desarrollan un enfrentamiento entre ellos, mientras involucran a la población civil en sus acciones de guerra, que ha sido llevada a la más absurda degradación.
Las confrontaciones existentes en Arauca y en otras regiones del país, solo evidencian el Fracaso de la paz con legalidad promovida por el actual gobierno de Iván Duque Márquez y no es algún vacío del acuerdo de paz, como lo ha manifestado el presidente Duque y su Consejero Presidencial para la Estabilización y la Consolidación Emilio José Archila en sus diferentes alocuciones.
Está claro, que mientras más se militariza la sociedad civil, se incrementa la violencia en estos territorios, dado que el foco de violencia sea profundizado en aquellos territorios militarizados, construyendo con ello, y de manera intencional y errada, el enemigo interno en las organizaciones sociales y defensoras de DDHH que tienen presencia en el departamento de Arauca.
El gobierno colombiano, es el único responsable de la grave situación de violencia y abandono estatal por la que atraviesa el pueblo araucano, pues para nadie es extraño, que lo que está ocurriendo en el territorio es una estrategia subrepticia, extendiendo el paramilitarismo en los distintos lugares del territorio colombiano, que se busca profundizar en momentos electorales dando guerra, para vender seguridad, como es de costumbre en los gobiernos de los últimos 20 años, y de paso, generando provocaciones al gobierno de venezolano bajo los intereses del gobierno de los Estados Unidos de Norteamérica.
Las organizaciones de derechos humanos, sindicales y sociales de diversas regiones del país, así como, distintas ONGs internacionales, nos sumamos al pueblo Araucano en un abrazo solidario y sororo para exigir con ellos que termine la guerra y se declaró un acuerdo humanitario que proteja la vida y los bienes de la población civil en ese territorio.
Desde nuestro compromiso estamos trabajando en una agenda articulada con organizaciones de DDHH y sociales de Arauca bajo los siguientes objetivos:
- A los distintos actores armados regulares e irregulares, llámense ELN, Farc disidencias, FF.MM. y de Policía, respetar integralmente los DDHH, acatar en su plenitud el DIH, excluyendo de su guerra a la población civil, organizaciones sociales y bienes civiles protegidos.
- Que se haga la Declaratoria de Estado de Emergencia Humanitaria para el departamento de Arauca, que conlleve a enfocar los recursos y la atención en la población civil afectada, y no en la militarización de la sociedad civil.
- Solicitar al gobierno de Iván Duque la Sesión de la Comisión Nacional de Garantías de Seguridad punto 3.4. del Acuerdo Paz, que permitan, escuchando la problemática de la comunidad, desarrollar las acciones en favor de la comunidad y los líderes sociales.
- Establecer de manera inmediata una propuesta de diálogo tanto con el Ejército de Liberación Nacional, cómo con los grupos armados, incluidas el que allí están actuando, a fin de generar los compromisos respectivos para desescalar el conflicto en esa región del país, y el desarrollo de una política de diálogo para la paz, qué el país reclama hace mucho tiempo.
- Un llamado a las diferentes expresiones religiosas y de fe, intermediar a través de sus autoridades, entre ellas al Papa Francisco para que se haga un llamamiento a los grupos armados sin distinción y al gobierno colombiano a declarar un cese al fuego inmediato.
- La inmediata salida del gobernador militar impuesto, pues, así como las organizaciones de la región, consideramos que su actuar profundiza la violencia y no conlleva a la búsqueda de la paz, tan necesaria en el territorio.
- Exigimos al Gobierno garantizar la sesión de la Comisión de Paz de Senado y Cámara del Congreso de la República en el territorio, con la participación de las comunidades y líder/as sociales.
- El Estado no puede renunciar a la garantía del deber de garantía de la vida y los DDHH consagrado en el art. 2, 5 y 7 de la Constitución Nacional
- Se hace un llamado fraterno y sororo a la población araucana, así como a los/as líderes y lideresas sociales, de mantener la unidad de las comunidades y de las organizaciones en el territorio, en pie de lucha exigiendo al gobierno colombiano garantías a la vida e inversión social en el territorio.
Estamos preparando el desarrollo de una agenda de acompañamiento en el territorio de Arauca con la participación de delegaciones de la comunidad internacional y el cuerpo diplomático.
Trabajamos por la preparación y realización de un foro regional de DDHH en el departamento de Arauca que permita conocer las denuncias qué las comunidades presentan en torno a las violaciones a los derechos humanos e infracciones al derecho internacional humanitario, del cual surja una propuesta de acuerdo humanitario sustentado en el DIH y en los derechos humanos.
Bogotá 25 enero 2022.